Novedades Baselworld 2017: Tudor Heritage Black Bay 41
Al igual que otros relojes de la familia Black Bay, la esfera del Black Bay 41 está inspirada en los relojes de submarinismo de Tudor de la década de 1950. Para este modelo, Tudor ha sido fiel a las líneas generales de esta línea, pero las ha reinterpretado para lograr una estética más formal y elegante. La verdad es que nos recuerda al clásico Rolex Explorer.
De esta forma, ha rediseñado la caja haciéndola más fina para que resulte más cómodo llevarla bajo el puño de una camisa, siendo hermética hasta 150 metros. Por ello también ha apostado por un cristal de zafiro plano en vez del abombado que emplea habitualmente y un bisel fijo en acero pulido. Asimismo, destacan las agujas snowflake que ya aparecían en el catálogo de 1969.
El Tudor Heritage Black Bay 41 está impulsado por movimiento mecánico de cuerda automática calibre 2824 y una reserva de marcha de unas 38 horas aproximadamente.
Se encuentra disponible con brazalete de acero o correa de cuero marrón con cierre desplegable de acero. Además, incluye una correa adicional en tejido de camuflaje, que ha sido confeccionada de modo artesanal con la técnica Jacquard por una empresa familiar de la región francesa de Saint-Étienne.
Precio: 2.780 €
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